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Iglesia Santa Felicitas



Hola amigos, quisiera comentarles lo que me ocurrió ya hace mas de una década en Barracas (Bs As.-Argentina), Recuerdo que estaba con una pareja amiga, eramos adolescentes y no teníamos dinero para salir entonces decidimos ir a caminar por el barrio, nos sentamos en una plaza que estaba justo en frente de una iglesia abandona (Sta. Felicita, ahora ya restaurada) y la imagen de este edificio era realmente aterradora, oxido, vidrios rotos, sin luz... Por lo cual decidimos entrar, como buenos adolescentes buscando asustarnos... no nos paso nada en ese momento y salimos de ahí , entonces cruzamos a la plaza nueva mente mirando hacia la iglesia, y yo dije: "Si hay algún fantasma que me de una señal..." al instante se apagaron todas las luces de la plaza y de la calle y volvió la luz a los 10 segundos aproximadamente... Nos quedamos un rato paralizados, pero seguimos allí, "bueno, a ver decíamos, eso fue coincidencia, dame una señal..." A lo que en un instante los tres pudimos ver todos 2 ojos como de una gato blancos (los ojos) estos se hicieron visibles sobre la puerta en el vitro redondo, no pudo haber sido un reflejo ya que los vidrios estaban rotos, y ahora sí... salimos corriendo hacia el norte para el lado del Parque Lezama, mientras corrimos esas 7 cuadras se iban apagando detrás nuestros las luces de la calle, hasta que llegamos al parque, luego nos quedamos en un lugar iluminado hasta que amaneció y nos fuimos cada uno a su casa... Se que no parece muy tenebrosa la historia pero realmente me paso, no es un invento...

Luego nos enteramos que en esa iglesia muchos años antes había muerto una joven y que muchos vecinos decían ver una dama de blanco en dando vueltas dentro del patio principal a la noche...

Y esta es la leyenda:
La leyenda de Felicitas Guerrero

El Fantasma de Barracas


En 1872 la joven Felicitas fue asesinada era considerada una de las mujeres más hermosas de la época. En el lugar hicieron una iglesia donde, dicen, se aparece su espíritu.









La leyenda cuenta que la joven y bella Felicitas Guerrero de Alzaga se aparece vestida de blanco. Que carga con lo que queda de un viejo vestido de época, otros dicen que no: que en realidad es una túnica mortuoria, más acorde con sus desgracias. La ven llorar desconsoladamente. Felicitas Guerrero de Alzaga fue viuda joven, rica y hermosa. Pero una maldición hizo que jamás descansara en paz.
Cuentan que empezó a aparecerse en los años 1930, y que cada 30 de enero vuelve a pasearse sin remordimientos por la iglesia que lleva su nombre y que desde siempre carga con su leyenda y su espanto. Un templo con muchas historias, en donde nadie quiere casarse.
El fantasma, como todos los fantasmas, tiene un origen trágico, reconstruido una y otra vez, durante años; Felicitas Guerrero era preciosa aunque desgraciada, a los 15 años se casó con Martín de Alzaga, que le doblaba la edad, y con él tuvo dos hijos, uno murió a los seis años y otro nació sin vida. A los 26 años, ella ya había enviudado. La leyenda narra que a pesar de su belleza y de una fortuna incalculable, quedó rodeada de muerte. Luego del luto, comienza a asistir a diversas fiestas de la sociedad; era famosa no solo por su belleza, sino también por su dulzura y buen carácter por lo que los pretendientes le sobraban. En una de esas fiestas conoce a Enrique Ocampo (tío de Victoria) que le declara su amor; comenzó a acosarla y perseguirla y a Felicitas, que en un principio se había sentido atraída, ya le estaba resultando molesta su presencia. Enrique prometió transformarse en su sombra….
Los galanes de la alta sociedad no tardaron en festejarla, en querer conquistarla por su belleza y su fortuna. Comentan que ella eligió a uno entre tantos, y quien otro desesperado, otro de sus pretendientes la asesinó. “Te daré una y mil veces la muerte”prometió: Enrique Ocampo, una sola bala resultó suficiente para acabar con la vida de la joven mujer, 30 de enero, ella muere en brazos de sus padres. Estos, que habían heredado todos los bienes de Felicitas ya ésta no tenia descendientes, optaron por mandar a construir una Iglesia en el mismo lugar donde su hija había fallecido, para recordarla; la placa dice: “Capilla de Santa Felicitas. Fundada el 30 de enero de 1879 por Carlos J. Guerrero y Felicitas C. de Guerrero en memoria de su hija Felicitas G. de Alzaga”. Dato agregado por Claudio de Corrientes: “ sabían que Felicitas temía una ´´nanna´´ negra que la crio y que al morir su ama enloqueció y , según la historia, fue la que primero vio el fantasma”
Aseguran que la maldición del pretendiente aún le impide descansar en paz, que el fantasma de Felicitas vive ahí y que incluso a veces la oyen llorar, asegura que hay quienes juran escuchar campanas que se agitan solas o haber sido testigos de tragedias y amores rotos, y que varias parejas evitan dar el sí en ese lugar, que actualmente custodian tenazmente decenas de gatos. Otros relatan que hubo novios y novias que se arrojaron desde su torre.












Pero también algunos aseguran que las rejas, en cambio, les devuelven a los amantes despechados su amor para siempre, sólo deberán ir hasta la entrada y atar un pañuelo blanco en cualquiera de sus barrotes, y pedir que el amor llegue a sus vidas o pedir que regrese el amor perdido, (aunque el cura encargado de la iglesia asegura que es frecuente encontrar ropa interior atada).
Verdad irrefutable, o no, en el barrio prefieren mantener viva la leyenda. Algunos aventuran que el cuerpo de Felicitas busca descanso eterno en el cementerio de Recoleta. Otros sostienen que está enterrado en la iglesia que, además, le da lugar al mito. Lo cierto es que cada 30 de enero, los más desdichados siguen dejando pañuelos o cintas blancas atados en sus rejas, como ofrendas de amor y sus pedidos son concedidos . No les importa lo demás: si aparecen mojados, con lágrimas de Felicitas, habrá deseos cumplidos y el amor por fin llegará. Y será para siempre.
No paso mucho tiempo para que la historia del fantasma de felicitas fuera desparramada por quienes intentaron contraer matrimonio en esta iglesia levantada donde fue el sangriento asesinato de la joven viuda, muchos afirman haberla visto cada 30 de enero fecha de su asesinato, llorando y gritando desconsoladamente detrás de la rejas de la iglesia, pidiendo ayuda o cada noche de tormenta, puede oírse el sonido de las campanas.





La estatua de felicitas




Hay algo mas allá de esta trágica historia, dicen que cada persona que osa tocar la excepcional estatua que representa a Felicitas junto a su difundo hijo Felix, se llena de desgracias al persona que los toque, A pesar de ser una hermosa iglesia, es la menos elegida para casamientos: la trágica historia aún pisa fuerte. Cuentan que si tocas la estatua, las peores desgracias caerán sobre vos pero si tocas las rejas de la entrada, recuperarás tu amor para siempre. Los vecinos dicen que el fantasma de la viuda aún vaga por allí, y que todos los 30 de enero, se la puede ver en su vestido blanco, llorando desconsolada frente a las rejas y que las noches de tormenta suenan, sin causa lógica, las campanas. Pero hay más: en 1981,la Iglesia fue donada al municipio, y comenzó su restauración por el arquitecto Devincenzi; las alas de los cinco ángeles de mampostería estaban caídos simétricamente y cuando comenzó a tallarlas, también sonaron las campanas.
Así que si estabas por visitar esta iglesia y la estatua de felicitas y su hijo Felix no oses tocarlos porque una terrible maldición te acompañara el resto de tu vida.

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